Un caso muy sonado ha sido el del Colegio Católico Nuestra Señora de Loreto, en la localidad de Novato (California, Estados Unidos), donde una profesora sin vacunar y con síntomas de Covid, continuó asistiendo a impartir clases, quitándose la mascarilla eventualmente para leer en voz alta.
Lamentablemente solo transcurrió una semana, para que la mitad de los alumnos dieran positivo, pese a que las ventanas estaban abiertas, los niños sí llevaban mascarilla y había un purificador de aire en el aula. Esto demuestra que la variante delta no deja margen para cometer errores.
Según el epidemiólogo Tracy Lam-Hine, principal autor del estudio de este brote, debemos tomar especial atención a este caso, puesto justo ahora es que muchos países anuncian la vuelta a clases, después de las vacaciones de verano. “La lección más importante es que no podemos confiar en una sola capa de protección o incluso en dos. Tenemos que utilizar todas las estrategias de prevención a la vez”, subraya el investigador, del Departamento de Salud del condado.
La variante delta es el doble de contagiosa que las versiones anteriores del virus, ya que su carga viral en los infectados es hasta 1.000 veces mayor, de acuerdo a un estudio preliminar realizado en China, ya que si un enfermo de Covid podría contagiar a dos o tres personas promedio cuando se originó la pandemia, en el caso de la variante delta el número a infectar es de cinco.
La Asociación Española de Pediatría ha reforzado sus propias recomendaciones, y ante el regreso al colegio, instruyen a mantener la mascarilla obligatoria para los niños mayores de seis años, incluso en espacios abiertos como el recreo al aire libre.
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Existe el miedo a que sean los niños los que reserven el virus, cuando en España el 93% de los adultos superiores a 40 años están vacunados, y solo el 55% de los adolescentes de 12 años han sido vacunados con pauta completa. “Es evidente que, actualmente, la población más susceptible de infectarse son los niños menores de 12 años y aquellos mayores que aún no han completado la pauta de vacunación”, advierte Mellado, de la Asociación Española de Pediatría.
El contagio en adolescentes está disparado, aunque para estas edades suelen ser asintomáticos o leves. El Centro Nacional de Epidemiología advierte que “la covid puede atacar a niños sanos, pero el riesgo está en aquellos menores que tienen enfermedades previas y además que tengan familiares adultos no vacunados”.
De manera que, la vuelta a clases representa una oportunidad de entrada al virus, y es menester de padres y maestros tomar las medidas preventivas del caso. No olvidar el lavado de manos, el distanciamiento social y las normas de higiene en el salón de clases y en el hogar.
