Según Augustin Barruel, sacerdote jesuita de 1741, los Iluminados de Baviera, los Filósofos Ilustrados y los Masones, establecieron una conspiración para destruir a la cristiandad, asunto que la política europea y norteamericana aún mencionan en sus discursos y campañas.

Después del éxito de su libro “Memorias que ilustran la historia del Jacobinismo”, se empezaron a tejer teorías que perduran, aunque los masones no están interesados en afirmarlo o desmentirlo, tampoco fue el único que los adversaba. En la historia están el Papa Clemente y el mismísimo Hitler por ejemplo.

¿De quién es la culpa? De la Masonería…

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¿Qué es eso de la masonería?

La constitución de la Gran Logia de Inglaterra de 1723, no se apega a la visión rebelde y conspirativa que ya se le atribuía, pues dice:

“El masón está obligado por su pertenencia a obedecer la ley moral, y si entiende correctamente el arte, nunca será un estúpido ateo, ni un libertino sin religión”

Básicamente, se deben a las órdenes fraternales. Hasta ahora, su propósito es ayudarse, cumplir ritos y cooperar con la superación de sus miembros, fuera del contexto religioso que conocemos, ya que aceptan a cualquier Dios. Un ateo no podía ni puede ser masón.

Aquel temor al secreto masónico, se vio en 1792 cuando los masones gritaron por las calles Libertad, Igualdad y Fraternidad.

Ellos exaltaron su logia como cualquiera lo haría con su organización. Es la única estructura que ha sobrevivido a los milenios, pero la creencia de que hay algo más, sigue alimentando la paranoia acerca de ellos.

Lo esencial es tener dos creencias:

1) La de un “Gran Arquitecto del Universo”, (tomado del Neerlandés Juan Calvino), referido a cualquier Dios.

2) Creer en la inmortalidad del alma.

Muchos masones con pensamiento libre, participaron en las luchas de independencia de Estados Unidos, Hispanoamérica y la Revolución Francesa. En aquellos tiempos movidos por la presión política, defendían sus ideas y preparaban sus proyectos (de ambos lados).

En 1828, después de un presunto atentado donde estaba implicado Santander, que era masón, Bolívar prohibió la masonería a la que había pertenecido. Asunto que hasta hoy se debate por masones y adversarios.

Sus reuniones

Las juntas son formales, visten trajes oscuros con sombrero, un mandil que indica un corazón puro y guantes que simbolizan manos limpias. En estas reuniones, previamente agendadas pueden tratar la aceptación de posibles miembros, iniciación de un nuevo “hermano”, asuntos administrativos, aprender a reconocerse entre ellos, tribunal disciplinario, etc.

Aunque ahora hay mujeres en la masonería, sus reuniones son por separado, sus salones son impecables, con el altar del Templo de Salomón, donde realizan sus juramentos, y está prohibido hablar de política. Sus temas lecciones de la masonería son: práctica de las virtudes morales y sociales, trasmitir el renacimiento como hermano, la preparación para la muerte, y muchos más.

El secreto es que no hay ningún secreto, hay muchas cosas misteriosas como la forma peculiar de darse la mano, o las palabras que se dan a un candidato. El propósito es representar el recorrido del hombre sobre este planeta y saber que la importancia de los masones como individuos es superior a la masonería como tal.