El embrague, componente que se encarga de gestionar la potencia del motor hacia las ruedas, es un elemento cuyo estado es difícil de determinar. Saber cuándo un embrague está gastado y es el momento para cambiarlo es un gran misterio que guarda el motor. No es sencillo determinar su vida útil con kilómetros recorridos como es el caso del aceite o las llantas, por lo que se necesita considerar distintos factores para descifrar cuándo un embrague está lo suficientemente averiado.

¿Qué es un embrague?

Este elemento es el responsable de la transmisión de potencia desde el motor para el funcionamiento correcto de las ruedas. Dos discos conforman un embrague y ambos deben girar al mismo tiempo. En caso de que alguno o ambos discos presenten un desgaste considerable, el embrague podrá patinar y esto nos traerá problemas.

Cómo detectar un embrague gastado

Para poder determinar el desgaste de algún embrague es necesario prestar atención al sonido que emite nuestro motor cuando aceleramos la marcha y cómo se sienten las revoluciones. Una velocidad que incrementa en consonancia con las revoluciones es señal de que los embragues funcionan correctamente. En caso de gastarse alguno, se escucharán las revoluciones del motor más rápido que el incremento de la velocidad.

Averías del embrague

Una avería que podría presentarse además del desgaste típico del los discos del embrague, es que estos tengan un exceso de aceite que los haga patinar. En este escenario es importante explorar dónde estaría la entrada de aceite. En algunos casos, los discos se pueden carbonizar por sobrecalentamiento o mal uso. Ante un embrague quemado la única solución es cambiarlo.

Experimentar cambios al pisar el pedal del embrague

Cuando el pedal del embrague está más duro de lo común, se trata de un embrague gastado. Al suceder esto es recomendable comprobar el funcionamiento del cable de acción hacia el embrague. Si el pedal en vez de estar duro más bien tiene un recorrido más corto, esto también podría tratarse de un embrague gastado.

Al gastarse el embrague el funcionamiento de este proceso se detiene por completo. Es importante que una vez se compruebe que este es el escenario no se debe forzar más con el pedal ya que causaría un daño más severo que podría romper el volante del motor.