La popular cadena norteamericana Domino’s Pizza anunció regalar hasta $50 millones en comida gratis para hacerle frente a las altas comisiones de UberEats y DoorDash. La nueva promoción proclamada por la cadena les permitirá a sus clientes ordenar algún platillo gratis en el menú que ofrecerán estas aplicaciones de delivery de comida.

La polémica movida sin duda alegrará a millones de comensales, en especial en los Estados Unidos, pero disgustará a DoorDash y su competidor UberEats. El peculiar motivo de la decisión es uno digno de interpretar por sus posibles consecuencias a nivel global con respecto a la relación entre los usuarios y aplicaciones de delivery.

Domino’s se ha referido a las comisiones extras entre competidores como “una decepcionante sorpresa” alegando que estas aplicaciones cobran tarifas extras dependiendo de la ciudad o servicio requerido. “Pero no es el caso de Domino’s. Cobramos a nuestra clientela una comisión de delivery directa porque creemos que los clientes merecen ese nivel de transparencia”.

Esta promoción estará vigente hasta el 21 de noviembre en los Estados Unidos. Los clientes optarán por un ítem del menú que no represente un costo adicional en una de cada 14 órdenes, como explicó la compañía. Los consumidores tendrán hasta un 7% de oportunidad de incluir el platillo gratis a su orden, al aparecer el ítem adicional en la página de confirmación de compra.

La situación es compleja para las compañías que desarrollan aplicaciones para la entrega de comida como UberEats, DoorDash y demás, luego de una decisión gubernamental donde se limitó la cantidad de dinero que las terceras partes pueden ganar por entrega, tratando de ayudar a los negocios con problemas financieros.

La respuesta de estas apps fue la carga de tarifas extras que puedan escabullirse de las imposiciones legales. DoorDash agregó tarifas de delivery de hasta 1$ y 2$ en algunas ciudades mientras que UberEats imitó la misma jugada en otras metrópolis norteamericanas.

Domino’s Pizza, pionero en el delivery de comida por más de 60 años, reconoce la escasa viabilidad económica que implica emplear terceras partes o aplicaciones para realizar la entrega de sus productos. “Económicamente no tiene sentido” sentenció el CEO de la compañía, Richard Allison.

Ciertamente la posición de Domino’s es la de un creador de su propia infraestructura de pedidos y entregas a domicilio. Sin embargo, las tarifas extras parecen replicarse para demás restaurantes y países alrededor del planeta como consecuencia de la situación económica post-COVID, lo que mutaría en aguas pantanosas para tecnológicas que desarrollen aplicaciones para delivery.