De millones de autos que salen de las fábricas durante el año, muy pocos podrán valorarse en los millones de dólares, sólo los de una pequeña camada de tres. Cuando se habla de exclusividad y el máximo exponente de lujo, el tema de los automóviles está cubierto por completo por un solo fabricante: Rolls-Royce. Los fabricantes británicos han producido el coche nuevo más caro de la historia.
Algunos autos de colección podrán sobrepasar la marca del millón de dólares, pero escasamente tendremos la presencia de un auto nuevo que logre tal hazaña. El Rolls-Royce Boat Tail es una máquina que rompe todo esquema, todo paradigma de lo que conducir un vehículo infiere en las calles del mundo.
Los productos exclusivos y de edición limitada son los más codiciados por las personas. Pero las capacidades que acarician el pináculo del poder adquisitivo reservan objetos materiales como el Rolls-Royce Boat Tail para unos pocos. Con “pocos” refiriéndose a solo tres, ya que son tres los únicos ejemplares que la marca británica expedirá desde su fábrica. Cada ejemplar con unas especificaciones únicas que los hacen distintos entre hermanos.
La inspiración detrás del elocuente diseño del Boat Tail se remonta a 1932, cuando Rolls-Royce lanzó el Boat Tail original. Este particular automóvil emulaba la forma de un bote con ruedas, con la expectativa de hacer sentir al usuario cómo sería viajar en su lancha sobre cuatro ruedas.
Con un diseño que aún sorprende a simple vista casi 90 años después, el Boat Tail original sorprendía también con 6.75 V12 de 563 CV de potencia, exponente en su época. Sus dimensiones de 5.8 metros de largo eran imponentes y tenía espacio para cuatro plazas. Era fabricado a medida y su carrocería se hizo en aluminio.
La nueva versión Boat Tail diluye los extremos diseños del original en una versión más minimalista, sin perder elegancia en lo absoluto. Como cualquier Rolls-Royce, este modelo esconde elementos indispensables para el lujo y comodidad del usuario como: dos neveras, cubiertos y copas de lujo, banquetas y una sombrilla bajo una cubierta de madera.
La experiencia de conducir este Rolls-Royce no se escapa de la adrenalina; este modelo es completamente descapotable sin opción de instalar algún techo. Un divertido viaje hasta un lujoso picnic, mientras los pasajeros disfrutan del fresco aire libre.
El Rolls-Royce Boat Tail rompe con paradigmas más allá del diseño y comodidades del auto. Esta máquina es la de mayor valor en el planeta superando a otras maravillas del automovilismo como el Rolls-Royce Sweptail y el Bugatti La Voiture Noire, ambos costando 11 millones de euros. El Boat Tail tiene un asombroso precio de salida de 23 millones de euros.
