El incremento exponencial de las ganancias de Nintendo provocado por las restricciones de cuarentena ante el COVID-19 podría estar llegando a su final. La compañía fabricante de consolas de videojuegos, icónica en la historia moderna, anunció que sus ventas cayeron de manera drástica en un 10% en el segundo cuarto de año, un claro síntoma de los levantamientos de restricciones en distintos países del planeta.

Las ventas de los Nintendo Switch, comparándose en los mismos periodos en el 2020 y 2021, en el segundo cuarto del último registró un decrecimiento del 17% en comparación al del año anterior, saldando 119.752 billones de yenes, casi $1.000 millones. En este periodo se vendieron 4.45 millones de dispositivos Switch, hasta un 22% menos que los vendidos en el mismo periodo del 2020 con 5.68 millones.

Los factores que motivaron la caída en el desempeño de la compañía están directamente ligados a la pandemia del COVID-19. La flexibilización de restricciones de cuarentena alrededor del mundo les otorgó mayor libertad a las personas a realizar actividades cotidianas fuera del hogar como sucedía antes de la pandemia. La reconocida escasez global de chips semiconductores es otra delicada causante.

Nintendo señaló que distintos factores como los retrasos en logística causados por el coronavirus, sumado a la situación actual de los semiconductores afectaron de forma notoria la producción de sus productos. La compañía operante en Kyoto señaló que aún cuentan con un considerable inventario en sus almacenes de Norteamérica y Europa.

Las estadísticas muestran el comportamiento del mercado con la adquisición de distintos productos de Nintendo, figurando un comportamiento peculiar. El Switch cayó en sus ventas un 8%, mientras que la versión Switch Lite se precipitó a más de la mitad de sus ventas en solo un año de diferencia. En el campo de software, el popular título Animal Crossing: New Horizons vendió solo 1.3 millones de copias en contraste de las 10 millones vendidas en el 2020.

Nintendo, al igual que muchas otras compañías tecnológicas como Amazon, Facebook o Tesla, se regocijaron de un explosivo beneficio de la pandemia del COVID-19. Las ventas del fabricante de juegos sobrepasaron el 400% cuando las personas tuvieron que quedarse en sus hogares contando con los videojuegos como una de las distracciones más prácticas.