Una emergente investigación del Wall Street Journal coloca a Facebook de vuelta al epicentro de la crítica general con la filtración de documentos internos. Los archivos examinados por el diario norteamericano exponen discutibles prácticas de la compañía, resaltando el conocimiento de Facebook sobre el severo daño en la salud mental que tiene Instagram sobre los jóvenes, especialmente niñas y adolescentes.

La investigación denota una evidente discrepancia ente lo que alega Facebook ante los medios – y entes gubernamentales – y lo que fácticamente conoce la compañía acerca de los efectos perjudiciales de sus productos. El catálogo de jugadas de relaciones públicas de Facebook se cimentó a modo categórico en negar, ocultar y desestimar el peligroso impacto de su trabajo en la sociedad.

“Empeoramos los problemas [de aceptación] de imagen corporal en una de cada tres niñas adolescentes” fue citado en un reporte de investigación interna de Facebook del 2019. Este aspecto es de suma alarma tratándose de una compañía con claras y anunciadas intenciones de expandirse al público joven con Instagram for Kids.

Según el WSJ, durante el 2019 y 2021 Facebook ordenó y condujo una quirúrgica investigación para evaluar el impacto en la salud mental en adolescentes, recurriendo a encuestas, grupos de discusión y largos cuestionarios. Los resultados demostraron que el 32% de las niñas adolescentes alegaron que “Instagram las hizo tener una peor imagen corporal”. El 13% de los adolescentes británicos y 6% americanos relacionaron directamente el origen de sus pensamientos suicidas con el uso de la red social.

“Los adolescentes culpan a Instagram por el incremento en la tasa de ansiedad y depresión… Esta reacción fue emergente y consistente en todos los grupos participantes” Demostró otra diapositiva de la investigación obtenida desde los documentos internos de Facebook.

Como era de esperarse, poco tiempo luego de publicarse la investigación del Wall Street Journal se manifestó la respuesta del Senado de los Estados Unidos – donde Mark Zuckerberg se vio obligado a ser cuestionado por los senadores repetidas veces –  acusando la precaria transparencia de Facebook.

Un grupo de senadores estadounidenses ordenó el lanzamiento de una investigación que involucra al Subcomité de Protección al Consumidor, Seguridad del Producto y Seguridad de Información. También se instó formalmente a Facebook con una carta para que la compañía abandone su plan de desarrollar una versión de Instagram para niños.