Múltiples servicios de redes sociales han sido bloqueados temporalmente en Pakistán. El mundo se ha enterado de esta decisión del gobierno pakistaní por medio de un comunicado del mismo denominado “Bloqueo Completo de las Plataformas de Redes Sociales” además de miles de denuncias por parte de usuarios.

Según este comunicado oficial, el gobierno ordenó a la Autoridad de Telecomunicaciones de Pakistán bloquear todas las plataformas de social media, incluyendo las populares WhatsApp, YouTube, Twitter, Facebook, YouTube y Telegram, bajo un horario partiendo desde las 11am hasta las 3pm en tiempo local.

¿A qué se debió el bloqueo?

Sin lugar a dudas, bloquear todas las plataformas de redes sociales del país, y por consecuente denegando la comunicación local con el resto de la web global, es un movimiento delicado con importantes consecuencias por parte de cualquier gobierno, por lo que debe existir una sólida razón para tal empleo.

En el caso de Pakistán, este movimiento es una jugada del gobierno pakistaní en confrontar a un violento grupo terrorista y evitar que los últimos días llenos de protestas a lo largo del país asiático no escalen en una violencia desmedida que perjudiquen a las multitudinarias congregaciones de plegarias, correspondientes al mes sagrado de Ramadán que comenzó apenas hace tres días.

Durante esta semana, las autoridades detuvieron a Saad Rizvi, líder del partido islamista radical Tehreek e Ilabbaik Pakistan o TLP según sus siglas, partido ahora catalogado como grupo terrorista por el gobierno. Esta detención surge como represalia por las manifestaciones organizadas por el TLP que bloquearon las importantes ciudades de Karachi, Lahore y la capital Islamabad.

El factor francés

El motivo detrás de las manifestaciones promovidas por el TLP – cuyo criterio aparenta ser suficiente para bloquear las tres ciudades pilares de Pakistán – se remonta a la decapitación del profesor Samuel Paty en Francia por un grupo de fanáticos luego de que Paty mostrara caricaturas del profeta Mahoma, el 16 de octubre del 2020.

Ante el vil asesinato notoriamente conocido a nivel mundial, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, alegó en respuesta que los franceses libres “no renunciarán a las caricaturas” como derecho a la libertad de expresión, el 21 de octubre del 2020.

La protesta musulmana como reacción a lo establecido por Macron ha sido digna de records históricos, alineándose millones de musulmanes alrededor del mundo a refutar la posición del mandatario francés.

En el caso del TLP, la masiva manifestación nace de este sentimiento anti-Macron, la expulsión del embajador de Francia aparenta ser la exigencia principal. Pakistán, por su parte, ha aclarado su intención de prohibir el TLP en el país.