El mercado del turismo espacial parece estar consagrándose cada semana. Lo último en concretarse ha sido el primer vuelo orbital acordado entre Virgin Galactic y su nuevo cliente: el Instituto Internacional de Ciencias Astronaúticas (IIAS). En este próximo viaje estará la reconocida científica Kellie Gerardi, civil que conduce investigaciones bioastronauticas como también realiza pruebas de trajes espaciales en gravedad cero.

El próximo lanzamiento dictado por Virgin Galactic llevará a Gerardi a realizar múltiples experimentos. Esta asociación marca un precedente en la competencia entre las nuevas firmas de desarrollo de transporte aeroespacial, demostrando las intenciones de los institutos espaciales de entablar relaciones comerciales y científicas con compañías de transporte privadas.

Entre los experimentos que Gerardi hará en la nave del Virgin Galactic, se enfocará en las pruebas de nuevas tecnologías de medicina. Se probará un nuevo sistema de monitorización biológica que analizará los efectos que los viajes especiales causan en los astronautas.

Han sido múltiples los viajes parabólicos en los que ha estado la científica norteamericana. Los viajes parabólicos son vuelos de amplia altitud que ciertas naves pueden alcanzar, estos vuelos simulan un ambiente donde la gravedad es reducida. Este traslado con Virgin Galactic sería su primer viaje al espacio como tal.

La competencia entre estas firmas privadas que desarrollan transporte aeroespacial ha tomado un gran impulso en el 2021. Los lanzamientos exitosos del SpaceX y sus proyectos para asociarse con instituciones como la NASA. La proyección que tiene Blue Origin con el primer vuelo de su New Shepard con tripulación humana y actualmente la incursión espacial científica de Virgin Galactic.

El biomonitor que Kellie Gerardi llevará al espacio fue desarrollado por una asociación entre el startup canadiense Hexoskin y la Agencia Espacial Canadiense. El “Astroskin” como es denominado el prototipo, se construyó para monitorear el impacto del lanzamiento y regreso a la órbita espacial en el organismo de aquellos que emprendan viajes espaciales.

Este no es el único vuelo programado por Virgin Galactic, la nueva “aerolínea espacial” pactó volar al también científico Alan Stern, quien emprenderá nuevos experimentos con la NASA y el Instituto de Investigación del Suroeste. El enfoque que ha tenido Virgin con su proyecto aeroespacial es el de ofrecer viajes de turismo espacial para astronautas privados, sin embargo, la investigación comercial es otro elemento fundamental a explotar en este nuevo negocio.