En este artículo haremos una continuación de la publicación anterior: “Consejos para mantener en buen estado la transmisión automática de tu auto“, con consejos específicos para este tipo de transmisión:

Cambia el líquido de transmisión con frecuencia: estos cambios someten a mucho esfuerzo al fluido de la transmisión, conocido popularmente como ATF (Automatic Transmision Fluid) aunque en la actualidad lo correcto sería llamarlo Dexron o Pentosin, que son los que con más frecuencia se usan. En estos cambios es prácticamente la presión hidráulica la que mueve el auto y el aceite sufre mucho. No escatimes en él, usa el recomendado por el fabricante y cámbialo en los intervalos fijados o incluso algo antes si haces un uso intensivo (llevas remolques, mucho uso en ciudad, puertos de montaña…).

No abuses del kick down (sobremarcha). lo mismo que en el caso de los cambios DSG.

Espera un par de segundos tras encender: antes de pisar el acelerador para iniciar la marcha, espera un par de segundos después de haber encendido el motor para darle tiempo a la bomba de la Transmisión a llenar bien el convertidor y que todo esté con la presión correcta de trabajo.

Pon la N en las paradas prolongadas: En caso de paradas de larga duración motivados a fuerte tráfico es recomendable poner la palanca en la N para que el convertidor no esté arrastrando constantemente. Reduciremos el consumo de gasolina y no recalentaremos demasiado el líquido de la transmisión, además las vibraciones que llegan al habitáculo son menores.

Freno pisado y parado para mover la palanca. Algunos autos modernos no requieren que estés atento a este consejo, pues sencillamente no te dejaran mover la palanca si no estás detenido. Pero en muchos autos antiguos este error puede provocar problemas graves. El auto automático no está diseñado para cambiar los modos en movimiento, y hacerlos sometnen al mecanismo a una presión para la que no están preparados. Por eso, recuerda que si has de pasar de P a D, el auto debe estar detenido. Lo mismo si metemos marcha atrás o ponemos posición de parking.

Cuidado cuando te remolquen. Nunca sabemos cuándo vamos a tener una avería y vamos a necesitar la ayuda de una grúa. Al igual que en los autos con cajas de cambio manual, la Transmisión debe estar en punto muerto. Algunos autos poner el punto muerto requiere hacer cambios en el interior de las molduras. Si no sabes cómo poner el punto muerto, debe llevarlo una grúa de plataforma pues si lo arrastra (sin tener el punto muerto) la avería puede ser realmente cara.

Nada de punta-tacón. Considerando que un cambio automático trabaja en constante comunicación con el servo freno, es recomendable no practicar técnicas poco habituales fuera del mundo de la competición, como pisar el acelerador y freno al mismo tiempo o trabar las ruedas con el freno de mano para deslizar el tren posterior (sí, hacer un trompo). Al hacerlo, pueden dañarse los moduladores de vacío del cerebro hidráulico de la Transmisión.