Los autos con transmisión automática brindan una mayor comodidad al conductor, sobre todo en ciudad y en los viajes largos. Pero debes saber que un auto con Transmisión automática necesita una serie de cuidados diferentes a los que quizás no estés acostumbrado.
Un posible arreglo en esta parte del vehículo puede convertirse en un problema, por ello, conviene optimizar al máximo su funcionamiento con estos consejos para el cuidado de la Transmisión. Primero de todo, deberías identificar el estado de este componente
Indicadores del estado de la Transmisión automática
- El tiempo de reacción en frío al arrancar el vehículo es excesivamente largo.
- Falta potencia en el arranque.
- El cambio de marcha es lento y, en ocasiones, resulta casi imposible.
Como hay varios tipos de cambios, tenemos que diferenciarlos porque cada uno tiene sus trucos para mantenerlos en perfecto estado y sacarles el máximo rendimiento. Básicamente hay tres tipos transmisiones automáticas: las tradicionales con convertidor de par, los de variador continuo (CVT) y los de embragues pilotados de disco, que pueden ser simples o de doble embrague (cada marca los denomina de una manera, DSG, DCT…).
Malos hábitos adquiridos.
Pisa el freno.
Una mala costumbre al usar transmisiones automáticas tradicionalmente es mantener el auto parado en un semáforo o en una cuesta sin pisar el freno.
En los cambios antiguos, con el selector en la D (drive, marcha adelante) el auto empuja un poco y en una pendiente leve se mantenía parado. Es lo mismo que hacemos con un auto manual dosificando el acelerador y el embrague para que no se nos caiga hacia atrás el auto al arrancar en una cuesta.
En los automáticos antiguos no era demasiado malo, sólo recalentábamos un poco el convertidor de par (si no era demasiado tiempo) y gastábamos más gasolina, pero en los cambios automáticos actuales, esta mala costumbre provoca averías fatales.
Olvida el freno de mano.
En este mal hábito se usa la posición de parking (P) como freno de mano. Este gesto (bastante habitual) es especialmente grave en cuestas pronunciadas. La extensión excesiva que se crea en la Transmisión, provoca averías prematuras y holgaduras innecesarias.
Primero el freno de mano y luego la P.
En las transmisiones automáticas hay una posición que suele ser una P de Parking. Esta función lo que hace es poner un cerrojo en un piñón de la Transmisión para bloquear las ruedas y que no giren. Se tiene la mala costumbre de poner la P y no frenar o hacerlo después de haberla puesto.
Esto hace que el cerrojo dé un golpe contra el piñón y puede llegar a partirse el cerrojo o el dentado del piñón. Además, cuando queramos sacar la palanca de la P notaremos que va muy dura, con todo el peso del auto apoyado sobre él. Lo correcto es esperar a que el auto esté completamente detenido, poner el freno de mano y luego la P.
Primero la P y luego el freno de mano.
El consejo anterior es para aparcar el auto, éste es para iniciar la marcha. No sirve de nada haber tenido la precaución de no forzar el mecanismo al aparcar y hacerlo al salir.
Si soltamos el freno de mano antes que la P, el peso del auto se apoyará sobre el cerrojo y volveremos a forzar el mecanismo. Lo correcto es pisar el pedal del freno, poner el selector del cambio en la marcha que queramos (D para avanzar y R para retroceder) y soltar el freno de estacionamiento antes de iniciar la marcha.
Nivel del lubricante.
Normalmente se olvida que existe hasta que ya es muy tarde. El complejo funcionamiento de estos sistemas son más susceptibles de verse afectados por fallos. De esta manera, además del nivel de lubricante, debemos prestar mucha atención a la calidad de líquido hidráulico (lo reconocerás fácilmente por su peculiar color rojo), si al revisar midiendo el aceite el color se ha tornado oscuro entonces debes cambiarlo.
Por otro lado debes siempre verificar en el suelo o en los alrededores de la transmisión si existe algún charco de aceite, si es así entonces existe una fuga que debe ser atendida.
Ahora bien, para consejos específicos de cada tipo de caja de cambios te recomendamos leer los siguientes artículos:
