Esta canción que es muy escuchada en época navideña y que hasta es representada en muchos actos escolares, ha sido equivocadamente mal interpretada, todo porque lleva ese nombre: “Burrito Sabanero”.
Lo digo porque al estar viviendo desde hace 4 años en México pregunté a dos personas muy cercanas si sabían por qué se llamaba así la canción, su respuesta fue: “porque lleva una sábana”.
Al principio no puedo negar que me dió risa y fue allí cuando les aclaré que eso no era así, y que les conté la verdadera historia detrás del nombre de este villancico de origen venezolano -mi tierra-.
El autor es un músico venezolano llamado Hugo Blanco, y fue compuesta en el año 1972. El burrito sabanero lleva ese nombre porque la palabra “sabanero” es un término que se usa para relacionar cosas con una región de Venezuela llamada “La Gran Sabana”, zona natural y cultural que se encuentra al suroeste de Venezuela.
Esta región se caracteriza por tener valles, colinas y tepuyes, que son masetas de origen volcánico; y es también el lugar dónde se encuentra el famoso Salto Angel. Entre los rumores que se han tejido sobre esta canción es que, en realidad la palabra pronunciada era “tabanero”. Pero para demostrar que su origen es venezolano, está el hecho de que entre sus estrofas se canta la palabra “con mi cuatrito voy cantando mi burrito va trotando”.
La palabra “cuatrito” hace referencia a un instrumento de cuerda muy típico en Venezuela, y es parte simbólica del folclor del país. Dicho instrumento tiene una similitud con la guitarra española, pero a diferencia de ella el cuatro es más pequeño y tiene sólo cuatro cuerdas, de allí su nombre, y por ser más pequeño que la guitarra.
El sonido de este instrumento es más alegre y enérgico y es un acompañante obligatorio de los villancicos y las gaitas zuliana en Venezuela. Podría decirse que se asemeja al golpeteo de los pasos briosos de los caballos y, en este caso, del galopar de un burrito, que se siente contento por caminar aquellos 10 mil kilómetros que separan a Venezuela de ese famoso pueblo llamado Belén.
Esta canción considerada como un aguinaldo venezolano, fue grabada por el famoso autor de “Caballo Viejo”, Simón Díaz, y luego por el niño del grupo musical infantil venezolano llamado “La Rondallita” en noviembre de 1975. Es con la voz de este niño, Ricardo Cuenci, que esta canción se hizo más conocida, alcanzando gran popularidad en varios países de Hispanoamérica y Europa desde finales de los años 70.
Ahora la historia de este niño es como la de muchos, famoso por unos años y olvidado en la actualidad. Está pidiendo la ayuda del público y gracias a una entrevista que dio por YouTube, una influencer abrió una cuenta a su nombre en GoFundMe para recaudar fondos y ayudarlo económicamente.
Así que esperamos que toda la duda sobre el origen de esta canción haya sido aclarada.
