Quién diría que en la ciudad que ha sido llamada la capital del mundo, como es la Ciudad de Nueva York y, mas específicamente, la isla de Manhattan, se ha instalado una camarilla de oligarcas rusos. Estos rusos ricos han blanqueado miles de millones de dólares en los condominios de lujo de esta ciudad.
Pero, al parecer, los federales andan ya detrás de sus pasos. Porque esta historia salió y tomó calor luego de la invasión rusa a Ucrania, lo que puso a este grupo en la mira de esta agencia de inteligencia. Cabe destacar qué muchos de estos rusos están vinculados con el presidente de la Federación Rusa, Vladimir Putin.
Estos oligarcas rusos amasaron sus fortunas luego de la caída de la Unión Soviética ya que, al privatizarse los activos estatales, luego del colapso a principios de los años 90, estos se hicieron con dichos activos y se convirtieron en los nuevos dueños de estas empresas. También hay mencionar que muchos de ellos jugaron un papel muy importante en la subida de Putin al poder en el año 2000.
Claro, al parecer Vladimir Putin fue prudente para que la influencia de estos amigos no afectara sus decisiones políticas. Luego de lo sucedido con Crimea en el año 2014, de las sanciones y de la invasión que su amigo presidente hiciera a Ucrania, estos oligarcas están siendo tratados como parias.
Países como los Estados Unidos y Europa han prometido confiscar sus grandes cuentas bancarias, así como sus propiedades inmobiliarias, entre las que se cuentan yates de lujo y aviones privados. Estas propiedades y más específicamente las inmobiliarias, alcanzan sumas sobrevaloradas y muchas de ellas se encuentran en la Ciudad de Nueva York; todo esto según un colaborador de Newsweek, que ha documentado todo en su libro “Los Nuevos Reyes de Nueva York”.
Este libro los menciona como los renegados, magnates y jugadores que han remodelado el horizonte más famoso del mundo, y es por ello que las autoridades estadounidenses andan tras sus pasos. Si vemos hacia atrás, este ha sido el secreto mejor guardado de la época, porque desde el 2000 hasta el 2010 se hicieron dueños del mercado inmobiliario de alto nivel porque, además de la Isla de Manhattan, también hicieron lo mismo en Miami y Los Ángeles, ciudades donde la presencia de estos oligarcas es vista a diario. Y es que aunque quisieran mantener el perfil bajo, sus lujos y guardaespaldas eran muy evidentes.
El presidente Joe Biden anunció que irán tras sus fortunas, las cuales serán confiscadas. Ojalá que estos oligarcas no hayan tenido otras intenciones más dañinas para con este lado del mundo.
