Un ensayo clínico está siendo puesto en práctica en seis países, entre ellos dos hospitales españoles como lo son el Vall d’ Hebron y el Hospital del Mar en Barcelona, ellos han podido demostrar que aquellos pacientes de Covid-19, que no habían sido intubados en condiciones graves, fueron colocados en posición decúbito prono, es decir boca abajo, mejorando su pronóstico, y de esa forma no tener la necesidad de intubación y con ello evitar la muerte.
El estudio ha sido publicado en la revista The Lancet Respiratory Medicine, ya que es una gran investigación donde se estarían analizando los beneficios de colocar a los pacientes en dicha posición, y con ello, dar una alternativa con esta nueva rutina médica en la lucha contra la terrible enfermedad por coronavirus.
En este estudio ha tenido una participación el médico intensivista, director del Servicio de Medicina intensiva del Hospital Sant Pau de Barcelona, el doctor Jordi Mancebo, quien ha sido uno de los primeros en estar aplicando esta técnica en España. Explicó el pasado mes de noviembre que en su hospital el 80% de los pacientes de Covid-19 que estuvieron en la UCI fueron colocados en esta posición boca abajo, con la finalidad de mejorar la oxigenación arterial.
A raíz de esta técnica, Francia lo ha corroborado por primera vez, algo que ya muchos médicos intensivistas habían probado, al colocar a los pacientes en esta posición, aplicándoles la oxigenoterapia de alto flujo, para pacientes con problemas de insuficiencia respiratoria.
Los ensayos fueron realizados a unos 1.126 pacientes entre abril del 2020 y 2021.
¿Cómo se aplica esta técnica? Va en dos sesiones de 30 minutos en una medida de 5 horas diarias, un 46% de estos pacientes necesitaron intubación o tuvieron un pronóstico fatal hasta 28 días después de la inclusión en el estudio.
Podemos decir que evitar la intubación reduce el riesgo de sufrir complicaciones, y por lo tanto será un beneficio colectivo al disminuir el uso de respiradores, ya que esto mejorará la disponibilidad en muchos países. Dicha práctica se estaría aplicando en España, Francia, Canadá, México, Irlanda y Estados Unidos.
En consecuencia, el uso de esta nueva alternativa es muy sencilla de aplicar, y no ocasionaría ningún coste ni riesgos asociados. Pero lo que más sirve contra esta pandemia es cuidarse y usar tapabocas o mascarillas, así como evitar las reuniones innecesarias, nosotros mismos tenemos la solución, la sana distancia.
Fuente: Milenio
