Para aquellos escépticos trataremos de explicar lo que para muchos son historias de ciencia ficción, pero para aquellos amantes de la vida fuera del planeta Tierra, son teorías de su origen, aquí trataremos de conocer un poco más de las dos versiones.

Los primeros en observarlo fueron astrónomos del sistema de sondeo continuo ‘Pan STARRS’ de la Universidad de Hawái, el nombre que decidieron ponerle fue “Oumuamua” que en hawaiano significa “mensajero de lejos que llega primero”. Se trataba de un objeto de aproximadamente 400 metros de largo, que giraba muy rápido y con gran brillo.

Teorías del misterioso origen de ‘Oumuamua’
Twitter: @PanSTARRS1

Científicos del Centro de Astrofísica de Harvard-Smillsoniar de los Estados Unidos, sugieren que su formación fue debido a un proceso natural, todavía desconocido. Shmuel Bialy y Abraham Loeb, coautores de un estudio publicado en Astrophysical Journal Letters aseguran que Oumuamua es una sonda totalmente operacional enviada de manera intencional a las proximidades de la Tierra, por una civilización alienígena.

Loeb dice que podría tratarse de un asteroide interestelar, nave o dispositivo extraterrestre, haciendo mención de que pudiera ser de una nave que cruzó el sistema solar, comparando este caso con una película sobre el espacio, donde hace referencia al parecido con esta realidad.

Para el 2018, Bialy defendió esta teoría y sería debido a la aceleración que el objeto o asteroide manifestó al alejarse del sol. Esto dio pie a pensar lo que estaba planteando su compañero, pero son muchos los que opinan que no hay fundamento alguno para dar por hecho esta afirmación y que solo se trataría de conseguir titulares en portales de este tipo de noticias, o para darle mayor publicidad a su nuevo libro llamado ‘Extraterrestre’, donde sostiene que Oumuamua es el primer “asteroide extraterrestre”, y entre otras de sus teorías hace mención a veleros espaciales.

Pero, ¿qué sabemos en realidad de esta piedra voladora?

Fue descubierta en octubre de 2017, un objeto nada normal, con unas medidas aproximadas de 400 metros de largo y con un ancho de diez veces menor, con una superficie de color rojiza y una rotación veloz, una trayectoria algo caótica con cambio de luz brillante muy llamativa.

La controversia de inicio era que se trataba de un cometa o un asteroide, pero los cometas dejan a su paso una cola de características brillantes y éste no tiene ese efecto, pero los gases que se pudieron apreciar a su paso hacían pensar que sí, y que fueran los causantes de la variación en su trayectoria.

Al respecto seguro continuarán este tipo de teorías, tanto de ficción como la de científicos acreditados de famosas universidades, pero que el ser humano común y corriente no está muy interesado en prestarle demasiada importancia, esto hasta que se nos presente de manera auténtica una especie de otro planeta, ¿no lo creen?