Puedo decir con certeza que no debemos tomarlo como algo que esté de moda, y es que al ser una sobreviviente de cáncer de mama, se me fue recetada la vitamina D por mi oncólogo para que ayudara al fortalecimiento de mis huesos. Dicho esto, podríamos decir que no es sólo un suplemento aunque, para ser más claros, no existe ninguna evidencia de que su consumo tenga algún beneficio, y es que no es para cura realmente ninguna enfermedad.
Aunque muchos pensemos que es una vitamina, en realidad es una hormona cuya función principal es ayudar con el fortalecimiento y mantenimiento de nuestro metabolismo, incrementando la producción del fósforo y el calcio que necesitan nuestros huesos.
Los estudios han demostrado que la falta de vitamina D podría estar relacionada con patologías como algunos cánceres, diabetes mellitus, enfermedad cardiovascular, síndrome metabólico; enfermedades infecciosas y autoinmunes. Anteriormente se pensaba que exponerse al sol era suficiente para alcanzar los niveles de vitamina D necesarios.
Recientemente se han publicado algunos estudios sobre el consumo de la vitamina D, y el ensayo dió como resultado que el uso del suplemento de la vitamina D no es un respaldo para prevenir fracturas tanto en hombres como en mujeres. Esto salió en la Revista New England’s Journal of Medicine, y también se mencionó a la doctora Pilar Cubo, del Servicio de Medicina Interna del Hospital Universitario “Infanta Cristina”.
Pilar Cubo añadió que automedicarse estos suplementos no es buena idea. Consumir Vitamina D sin control médico puede tener efectos secundarios y hasta podría llegar a ser tóxico. Es por ello que al principio de esta nota hago mención de que a mi me fue recetada por mi médico de cabecera.
Respecto a otras formas de obtener la vitamina D, además de tomar el sol de la mañana, esta también se encuentra en el aceite de hígado de bacalao, salmón, sardinas, caballa, atún, champiñones y en la yema del huevo.
Lo que hace la vitamina D en nuestros cuerpos es lograr que el calcio se fije al hueso, y con ello consigue mantener su densidad. Sin embargo, si no existe en el organismo de nada sirve tomarla.
Ahora, respecto al riesgo de pasarse al tomarla, puede traer como consecuencia la hipercalcemía y esto, de forma prolongada, puede acarrear problemas renales ya que el exceso de calcio en la sangre afecta a muchos órganos.
Y como nos decían nuestras abuelitas y madres, hay que tomar el sol de 10 a 15 minutos por la mañana antes de las 12 del mediodía, suficiente para conseguir la vitamina D necesaria.
Como siempre le recomendamos: consulten a su médico de cabecera.
