Los médicos alrededor del mundo han hecho un llamado de atención hacia el consumo “alegre” de las bebidas energizantes, veamos por qué.

Lo primero que debemos saber es que la Administración de Bebidas y Alimentos de los Estados Unidos NO regula este tipo de productos, de manera que los ingredientes que contienen estas bebidas, van de 75 a 200 miligramos de cafeína por porción, esto quiere decir que es más del doble de los 34 miligramos de cafeína de un refresco carbonatado.

Sin contar que algunas de estas bebidas llevan aditivos como Guaraná, que a su vez cuentan con cuatro veces la cantidad de cafeína que los granos de café. Estos valores en exceso definitivamente afectan la salud, pudiendo causar náuseas, alteraciones del sueño, problemas cardiovasculares y nerviosismo, dolor de cabeza y falta de concentración entre otros malestares.

Otro aspecto de suprema importancia es el porcentaje del consumo según las edades, y estando libres en el mercado, aumenta el peligro al ser consumida por niños. Se estima que los adultos lo consumen en un 31%, personas de 10 a 18 años en un 62% y niños de 3 a 10 años en un 26%; números muy alarmantes que inciden directamente en los niveles de obesidad, híper ansiedad y taquicardias, ya que el líquido contenido de una lata de bebida energizaste equivale a 4 tazas de café y a 14,5 terrones de azúcar.

Los ingredientes que no son regulados pueden interactuar con ciertos medicamentos, agravando más el panorama, causando trastornos de humor, convulsiones, anomalías cardíacas, etc. Además el aumento de peso y la salud bucal también están en peligro por las grandes cantidades de azúcar, debilitando los huesos ya que la cafeína presente choca con la absorción de calcio en el cuerpo.

Una publicación del Journal of the American Heard Association de 2019, demuestra que el consume de un litro de bebida energizantes en menos de una hora, aumenta el riesgo de sufrir eventos cardíacos, incluso entre personas adolescentes sanas. El riesgo aumentaría si los consumidores son personas con patologías cardíacas anteriores. Otro estudio publicado en el Canadian Journal of Cardiology en 2015, también indica que el abuso de este tipo de bebidas entre jóvenes causará un mayor riesgo de arritmias y eventos cardiológicos como alteraciones del ritmo cardíaco, en cuyo caso el riesgo entre jóvenes deportistas es aún mayor.

Sin el boom publicitario que solo quiere VENDER, hay bebidas naturales que te llenarán de energía, aportan hidratación, vitaminas, electrolitos, potasio y sodio, energizantes y activador de flujo sanguíneo como: Zumos cítricos frescos, sal marina, agua de coco, Jengibre, te negro o verde, incluso mucho más barato y fresco.

Un dato anecdótico es que en una ocasión colocaban un eléctrico cerco en mi casa, bajo un sol abrasador de 30 grados, a los trabajadores les hice un frapé de Albahaca con limón, ellos la bebieron con agrado pero no sabían que era aquel jugo helado verde, cuando bajaron me preguntaron que les había dado a tomar porque se sentían llenos de energía para continuar.