Existen ya muchos datos de millones de caras en el mundo. El hecho de que mostramos nuestra cara en las redes sociales y dichas fotos quedan guardadas en la famosa nube.
Pero aún no sabemos a quién pertenecen nuestros datos asociado al contorno de nuestro rostro.
Que significa que tus datos sean tomados mediante tu cara y cómo puede esto convertirse en datos.
En la era actual en la que todo se mueve a través de la tecnología, habría que reflexionar sobre qué expectativas tenemos con respecto a que tiene acceso a nuestra cara o rostro como lo quieran llamar.
Un suceso que ocurrió en el capitolio de los Estados Unidos ha puesto el punto de partida sobre este tema, ya que esta herramienta se ha convertido en un instrumento vital para poder identificar a los que han participado en dichas manifestaciones.
La capacidad de poder identificar a persona nos hace preguntar si estaremos preparados para afrontar esta nueva arma tecnológica.
Se puede decir que mucho antes de estas protestas ya se podía acceder a identificar a personas por los datos de su rostro, lo que pasó es que no lo habíamos asumido y por más que nos moleste estas circunstancias nosotros lo hemos hecho voluntariamente al generar datos sobre nuestro rostro, ya sea voluntaria o involuntariamente.
Esta herramienta facial está muy presente en los espacios públicos. El uso de de esta tecnología para garantizar el que se cumpla la ley, para vigilancia o para otras iniciativas, tiene de claros fines sociales.
Llegaremos a preguntarnos cuál será el costo de perder nuestra intimidad al tener los datos de nuestro rostro.
Ya muchos gobiernos la están implementando, un ejemplo claro es lo que está realizando en Belgrado según un informe de ONG SHARE Foundation, donde se muestra en un video como se desplegaran miles de cámaras para funciones de vigilancia.
Su director de SHARE, Krivokapic Danilo, sostiene que esta tecnología de reconocimiento facial rastreará los movimiento de las personas que deambulen por la ciudad Serbia.
Esto hace que los movimientos de las personas se realicen en tiempo real mientras se pasean por Belgrado, ya que no es el único lugar donde esto ocurre. La tecnología y el gobierno van de la mano y esto según ellos dicen les da más opciones de controlar y rastrear el movimiento de personal en las fronteras.
