Linda Evenstad, de orígenes noruegos, nació en un pequeño pueblo de Connecticut, es la segunda de 3 hermanos. Con 6 meses de nacida su familia se mudó a Los Ángeles, ya que sus padres eran bailarines profesionales. A pesar de tener unos padres amantes del espectáculo, ella nunca quiso incursionar en el baile, ya que no le gustaba ser el centro de atención, era tímida y enfermiza.
La interpretación llegó a su vida como parte de una terapia de shock, unido con la casualidad y a un drama familiar. Su padre murió de cáncer cuando ella contaba con tan solo 15 años. Al acompañar a una amiga a un casting para un anuncio publicitario, al final ella fue la elegida.
Linda consiguió la fama con 23 años, en el Western televisivo ‘The Big Valley’, y dos años después, en 1968, se casó con el director y actor John Derek, sin embargo, en el año 1973 le dio la noticia de que tenía un romance con una joven modelo de 17 años llamada, Bo Derek, lo que le cambiaría la vida a Linda. Este divorcio para ella fue un golpe muy fuerte, pero dos años después se casó por segunda ocasión con Stan Herman, aunque este matrimonio tampoco duró mucho.
Ella confiesa que si no se hubiera divorciado de Derek, no hubiera hecho “Dinastía”, pero que entre sus pensamientos estaba la imagen de Elizabeth Taylor, llegando a imaginar que se parecería a ella si continuaba por ese camino. Cuando llegó el culebrón más exitoso de la televisión norteamericana, bajo la producción de Aaron Spelling, ella le daría vida al personaje de Krystle Carrington, quien fuera la segunda esposa del magnate, Blake Carrington, con una archienemiga, Alexis Carrington, la ex del multimillonario. Linda, en su papel de mujer florero, vivía en una constante relación de rivalidad y odio con la ex de su esposo, donde Joan Collins, que en su papel de mujer triunfadora en los negocios era su antagónica. Rivalidad que muchos espectadores llegaron a pensar que traspasó la pantalla, nada más alejado de la realidad, ya que ellas se conocían con anterioridad, y en palabras de Linda “gracias a Dios por eso”.
Esta serie fue un éxito total debido a los escenarios y las joyas, así como a los trajes que las dos rivales utilizaban, llegando a tener 9 temporadas, y en esta última ella se despidió de la serie.
Pero para no dejar pasar la oportunidad, hay que hablar de la polémica que se suscitó cuando entró a la serie el actor Rock Hudson. Ella menciona que fue unos meses antes de que él muriera a consecuencia del Sida. El entraría como un pretendiente de Linda, ella ya lo conocía, era muy divertido, le encantaba hacer bromas y se hicieron amigos, era encantador en todos los aspectos. Con todo lo que se habló sobre su salud, para él fue una tortura cuando tuvieron que hacer una escena de beso y tuvieron que repetirla, ya que por quererla proteger la besaba como un niño de 9 años, y la escena justificaba un beso apasionado. Luego ella supo lo que pasaba y entendió que él quería protegerla. Por supuesto que al saber lo que se llegó a publicar, hasta acusarlo de quererla matar, ella se enfureció, fue terrible que él tuviera que soportar eso en los últimos días de su vida.
Linda Evans en la actualidad vive en el estado de Washington, donde practica el poder de la mente y la consciencia. Fue este 18 de noviembre que cumplió 79 años y manifiesta que nunca se había sentido tan feliz como ahora, llegando incluso a aprender a esquiar a la edad de 67 años, y vivió una temporada con los Masáis de Kenia; ella cuenta con 20,000 mil seguidores en su perfil de Instagram.
Sin duda, siempre será recordada como la bella protagonista de la famosa serie “Dinastía“.
