En comparación con otras opciones de repostería los bizcochos siempre son fáciles de hacer, y acompañado de un café con leche por la mañana, o a media tarde con un café solo, son riquísimos, hoy les dejo una receta que no tiene margen de error y todos en casa van a amar.

Bizcocho de Vainilla, Frutos Secos y Chocolate

Dificultad: Media

  • Elaboración 15 minutos aproximadamente
  • Cocción 40 minutos aproximadamente
  • Tiempo total: 55 m

Ingredientes

Bizcocho de Vainilla, Frutos Secos y Chocolate

3 huevos grandes

180 gramos de azúcar blanca

160 ml de aceite de girasol

160 ml de leche liquida

250 gramos de harina todo uso

1 cucharadita de esencia de vainilla

2 cucharaditas de levadura química o polvo de hornear

100 gramos de gotas de chocolate

100 gramos de frutos secos (yo use nueces, almendras, avellanas y cacahuates)

Preparación

Precalentamos el horno a 180 grados centígrados,

Batimos muy bien los huevos por 5 minutos o hasta que queden en un punto de crema, está aquí el primer truco y es lo que nos va a permitir quede esponjoso,

Luego incorporamos el azúcar, seguidamente del aceite, que puede ser de girasol o en su defecto canola u oliva suave; hay personas que no optan por usar oliva para la repostería, pero si sabéis escogerlo bien, que realmente sea suave funciona perfectamente.

Incorporamos la leche y también puedes usar la de tu preferencia, puede ser entera, deslactosada o como la prefiráis,

Viene el turno de la esencia de vainilla para continuar con la harina de trigo previamente tamizada y la levadura.

Aquí va otro tip importante, luego de incorporar la harina debemos evitar batir mucho para no desarrollar el gluten ya que esto es lo que hace que nuestro pastel quede duro. Yo la incorporo con la batidora apagada; además que así no lleno todo de harina,

Por último los frutos secos y el chocolate.

Finalmente lo llevamos al horno con el calor por arriba y por abajo y sin ventilador a 170 grados centígrados en el molde que escojáis; a mi me encanta hacerlos en esos rectangulares de unos 20 centímetros, previamente engrasado y enharinado o forrado con papel para hornear por 30 a 45 minutos aproximadamente.

Tengan en cuenta que esto del tiempo de cocción siempre va a depender de la potencia de tu horno, a mí me gusta ponerlo a hornearse lentamente, verificamos siempre que está listo introduciéndole un palillo o cuchillo y que salga limpio, espera que se refresque para desmoldar y luego cortar en porciones.

Para organizar tu tiempo y que las preparaciones queden perfectas en la repostería es indispensable la organización y tener algunos materiales que te facilitaran el proceso. Por ejemplo, lo primero que debemos hacer siempre es medir y pesar las cantidades de los ingredientes que usaremos; un peso (bascula) digital es una buena inversión, conseguimos en el mercado unos muy chulos y económicos.

También las tazas de medida son súper importantes, asegúrate que sean de buena calidad para que no se les borren las marcas de medida pronto.

Un ayudante de cocina es lo ideal, pero si tu presupuesto da para un batidor manual también vale, aunque las abuelitas hacían sus biscochos a mano con paleta de madera y que ricos les quedaban.

¡Buen provecho!