Verlo montado en las canchas es electrizante, su calma, concentración y juego magistral te llena de orgullo latinoamericano. Se trata del Bowling, Boliche o Bolos como lo conozcas en tu país. Para los venezolanos este deporte llegó con los americanos, había canchas en varias ciudades hasta de 42 pistas, ahora queda solo el recuerdo.

Amleto Monacelli, el barquisimetano que nos representa desde muy joven, alcanzó lo que muchos no pudieron, ahora relajado casi con 60 años es entrenador y acaba de escribir un libro, en el que cuenta esa faceta que no conocemos, su nombre es: “Sueña, cree y hazlo”, un libro autobiográfico. Como un legado para ayudar a las personas a salir de sus tristezas y depresiones.

Nació el 27 de agosto de 1961, en Barquisimeto, incursionó con el bowling a los ocho años cuando su padre lo llevó al antiguo Pin Lara en la Av. Morán, tres años después Rodolfo, su padre abrió el “Bowling 20” que manejó durante 37 años. Ahí con 12 años ejecutó su primer juego perfecto, es decir 12 lanzamientos iguales de strike, para completar 300 pines en una línea, en la cancha tres.

A los 18 años se fue a estudiar inglés, regresó a su país y a los 20 años fue a concursar en la Asociación Profesional de Bowling de EU. En 1982 empezó a jugar profesionalmente y le tomó cinco años lograr su primer título, obtuvo siete segundos lugares y trece apariciones en televisión, pero aún no había podido ganar su primer torneo sino hasta que viajó a Japón en agosto de 1987.

En esta disciplina como en otras, hay premios en metálico, pero el Bowling siempre ha sido visto como un juego de élite, por ello los medios de comunicación subestiman el tremendo trabajo que significa lanzar un juego perfecto, sacar un spear o un Split, conservar el ritmo, concentrarse, no lesionarte durante una competencia o sencillamente irte por el canal. Por ello cuando Amleto comenzó a subir dentro del deporte querían tenerlo en los equipos nacionales, pero antes de ser profesional jugó el suramericano de Perú obteniendo el tercer lugar.

Amleto Monacelli, único venezolano en el Hall de la fama de la PBA

Instagram: @amletomonacelli87

No hubo oportunidad de jugar con la selección nacional porque inmediatamente se fue a Estados Unidos, y la razón de peso fue haber jugado y ganado un torneo NO federativo, en parejas acompañado por su Padre en la ciudad de Medellín en Colombia, con premiación monetaria, allí lograron el primer lugar y ganaron 20 000,00 $, La Federación les informó que si deseaban continuar jugando en torneos federativos debía devolver la premiación obtenida en Medellín.

 

Primer extranjero nacido estrella

Su estilo es único, con un gran poder de ejecución de un lado y balanceo del otro, eso se vio desde el principio cuando este hombre de 1.72 Mts. de altura, con talento para el bowling, extraordinaria persona, fluidez para tres idiomas y sencillez, se convirtió en el favorito del público. Amleto nunca rehusó firmar autógrafos, conversaciones, conferencia de prensa o cualquier cosa que ayudara al Bowling. Después de un inicio lento, en 1982 sorteó muchos obstáculos, se ganó un puesto en la historia del P.B.A.

Hijo de migrante Italiano, vivió en Venezuela que ahora produce migrantes a todo el mundo, ganó su primer campeonato en Japón y ejerció su profesión en los Estados Unidos, ganó su primer título con 26 años, se convirtió en la gran fuerza del tour por dos décadas, fue el primer extranjero en la historia en ganar el título de jugador del año por dos años consecutivos y el único no americano en ser inducido en la PBA HALL OF FAME. El más joven con 35 años en llegar a ese prestigioso mérito. Monacelli está en el 6to. Lugar en la PBA ALL TIME LIST.

 

Pero Amleto ha sabido aceptar lo que le ha ocurrido, aceptar no haber podido abrazar a su padre cuando murió en Venezuela en enero 2021, aceptar cuando migración no le dio ingreso porque no iba a trabajar sino a competir y perder torneos, aceptar haber dejado su casa en su país esperando un cambio, aceptar cómo exaltan a otros deportistas y no a los bolicheros, en especial a él, aceptar aquellas personas que no son felices con sus logros e incluso orar por ellos. Pero las cosas que te detienen no pueden quitarte en deseo de continuar con tus sueños.

Amleto Monacelli, único venezolano en el Hall de la fama de la PBA

Instagram: @amletomonacelli87