Sí, el nombres es complicado de pronunciar, así que quedémonos con “Ceguera Facial”. Descubrí la existencia de esta condición por casualidad -y tengo que decirlo-, mientras miraba una serie de tv, en la que se la mencionaba. Investigando sobre ello pude conocer que el nombre específico en su definición científica es Agnosia Visual; una alteración en la capacidad de reconocer objetos con la vista.

El no poder reconocer rostros que nos son familiares, e incluso nuestro propio rostro en un espejo o fotografía puede ser algo muy frustrante. Los que padecen de ceguera facial pueden identificar un rostro si se enfocan en alguna característica en especial que tenga esa persona, esto cuando se trate de un familiar o amigo. Saben que existe una diferencia entre los rostros, pero no pueden reconocer ni diferenciar de quién se trata si son extraños.

Estas personas pueden vivir vidas prácticamente normales adquiriendo algunos trucos que los ayudan a sobrellevar esta dificultad, trazando lineamientos para convivir con familiares y amigos, lo difícil es cuando tienen que convivir con otras personas.

¿Escuchaste sobre la ceguera facial? Se llama Prosopagnosia
foto webconsultas.com

Uno de los recursos que emplean para diferenciar a las personas son, por ejemplo, alguna cicatriz en el rostro, el color del cabello, gestos que hacen al hablar o modismos. De igual forma, se le recomienda a familiares que se identifiquen desde un principio para hacerles saber quiénes son.

En la serie que vi, llamada “Holo, mi amor”, enfatizaban mucho que uno de los personajes era un pedante porque no saludaba a sus compañeros al llegar al trabajo. Pero lo que ocurría es que no saludaba a nadie porque no podía reconocerlos; esto a raíz de un surgido a raíz de un suceso grave durante su niñez.

El término científico Prosopagnosis proviene del griego Prospon (que significa “rostro”) y Agnosia (la ausencia de conocimiento) o lo que coloquialmente se conoce como el problema para reconocer rostros. El creador de este término fue el médico J. Bodamer, en 1947, después de descubrir dos casos de este padecimiento.

¿De dónde surge ceguera facial?

Bueno, mucho se ha dicho que surge cuando está implicada una lesión cerebral, pero Hecaen y Angelergues, en 1962, sugirieron que la causa podría ser una lesión cerebral del hemisferio derecho, y que sólo esto bastaría para padecerla. 

¿Escuchaste sobre la ceguera facial? Se llama Prosopagnosia
foto pinterest.com

Esto quiere decir que surge de una lesión unilateral derecha, ubicada específicamente en el lóbulo occipital pero, de igual manera, en el parietal. Sin embargo, un estudio más reciente, realizado en 1982, planteó que tiene que ser una lesión bilateral simétrica de ambos hemisferios cerebrales.

Entonces, por lo general, las posibles causas son accidentes cerebrovasculares, un tumor cerebral y, en menos medida, un trauma cerebral; pero hay que mencionar que se han descrito casos de origen congénito. Tampoco es un padecimiento que aparezca de forma aislada, porque la Prosopagnosia suele venir acompañada de algún otro déficit en el reconocimiento de estímulos visuales como: identificar y distinguir colores; reconocer objetos lejanos o que están en lugares inusuales.

Cómo saber si tienes Prosopagnosis y cómo sobrellevarlo

Para saber si padeces de esta enfermedad, existe un test llamado Reconocimiento Facial de Benton, que se basa en el emparejamiento de caras en posición frontal, de perfil y en condiciones de luz baja.

Algunos trucos para reconocer personas si tienes ceguera visual:

  • Guiarse pro el cabello, forma, color y textura.
  • La voz y forma de hablar.
  • Alguna marca en el rostro o característica particular: cicatrices, lunares, color de ojos, forma de nariz, etc.
  • Si lleva gafas.
  • Forma de caminar.
  • Modo de vestir.

Con todas estas sugerencias, podrás ayudarte a reconocer familiares y amigos, claro está, siempre que sean del entorno más cercano y que ellos se identifiquen ante ti. Un claro ejemplo de que puede llevarse una vida normal, es el actor Brad Pitt, quien padece de esta condición.