La compañía Samsung realizó un informe financiero, el cual sugirió que debía subir de precio a NVIDIA para producción de su nueva serie RTX 3000, ya que la producción no le está resultando rentable a la empresa surcoreana, provocando la preocupación del mercado asiático principalmente.
La empresas Samsung y TSMC, se están llevando partes importantes de los semiconductores, dejando así, poco mercado para fabricantes que van escalando de a poco, por ejemplo: Global foundries y otros fabricantes chinos. Por un lado TSMC tiene a AMD y Samsung a NVIDIA, por lo que las dos empresas tienen trabajo por hacer.
Pero no solo es eso, sino que también los coreanos producen el Snapdragon 888 en un proceso de 5nm, que al parecer tampoco les está resultando muy rentable.
Samsung pone en un dilema a NVIDIA, haciendo que el precio de la serie RTX 3000 suba.
Como lo mencionamos todo esto surge a raíz del informe financiero que hizo Samsung, el cual también reveló que, el beneficio obtenido por el negocio de fundición asciende a 222 millones de euros (al cambio), lo que representa la cifra de un 5% en el segundo trimestre del año.
Claro, no podríamos comparar a Samsung con TSMC, por la simple razón de que no tiene la misma capacidad de producción y no cuenta con la misma tecnología, por lo que los coreanos no han conseguido suficientes ganancias para sustentar el futuro del negocio. Los directivos están inconformes con los números arrojados por el informe, además se dan cuenta que, la capacidad de producción de chips no es suficiente y piensan que es el momento perfecto para aumentar los precios.
Algo debemos tener en cuenta, que aún no se sabe cuál será el aumento de precio que se le impondrá a NVIDIA, al igual que a Qualcomm por la fabricación del nuevo procesador para smartphones Snapdragon 888.
Esto sólo señala una cosa, que NVIDIA tendrá que pagar más, a medida que suba la producción consignada a Samsung, y aquí viene la pregunta obligada ¿De qué manera verán los usuarios este aumento?, la respuesta más viable sería que aumentaran el precio del producto final, es decir de las RTX 3000.
Desafortunadamente, no solo se espera que suba esta serie, también se prevé que subirán las tarjetas gráficas de uso profesional, las cuales no se fabrican solas, ya que Samsung se encarga de ellas, y su producción no es barata. Así que si, todo apunta que la nueva gama de NVIDIA será la más afectada.
En esta situación podríamos predecir que el más afectado sería el consumidor, y honestamente no sería algo nuevo. Solo falta analizarlo un poco, porque en estos casos todo es un efecto dominó, es decir; NVIDIA pide su producción, se fabrican las tarjetas gráficas y se mandan al distribuidor, el mismo distribuidor las vende o se llevan a importación/exportación, el producto lo compran minoristas y el minorista lo vende al consumidor. Pero el aumento ocurriría desde la producción, así que resultará difícil negociar en ese punto.
Aquí el único ganador sería Samsung, ya que simple y sencillamente es el eslabón clave para NVIDIA. Lo único que queda es esperar la última palabra por parte de NVIDIA, y explicar a sus usuarios si subirá de precio, y lo más importante cuanto será.
