Desde el año 2000 el “Día Internacional de la Solidaridad” se celebra el 31 de agosto, esta fecha fue elegida en honor al movimiento social polaco ‘Solidaridad’, que fue representado en 1980 por el gremio sindical ‘Solidarność’, uno de los tantos movimientos responsables de la caída del muro de Berlín en Alemania. Lech Walesa, fue uno de sus dirigentes, quien posteriormente se consagró con el Premio Nobel de la Paz, gracias a que inculcó los ideales de la solidaridad alrededor del mundo.
Hoy en día, los alemanes que vivieron esa página negra de la historia, anhelan fervientemente que jamás exista un muro que los separe física y emocionalmente.
Cabe mencionar que existe otra fecha decretada oficialmente por la UNESCO, el 20 de diciembre como el “día Internacional de la Solidaridad Humana”.
Finalidad
Realmente a lo largo del tiempo no ha variado mucho el objetivo principal, se basa en un principio de ayuda sin la intención de recibir nada a cambio, o el ser humanitarios (solidarios) con otros.
Como Walesa decía: “solo en la medida en que todos nos ayudemos y trabajemos por una causa común, que proporcione el mayor bienestar a todos, en esa misma medida, viviremos en un mundo mucho más pacífico, enriquecedor y próspero para cada nación, pueblo o individuo”.
¿Cómo podemos conmemorar este día?
Como individuos, la mejor forma de celebrar este día, para empezar, es ser reflexivos de cuáles son las verdaderas necesidades de nuestra comunidad. A medida que aprendamos a ser solidarios con nuestros cercanos la vida fluirá naturalmente, siempre buscando una solución a sus necesidades más básicas y el bien común.
Autonomía
La ONU dice que este día no tiene un plan lineal, pues cada país o pueblo, es independiente de celebrarlo a su manera, regido por las prioridades de los habitantes.
Aunque la crisis que vive la humanidad nos llena de asombro, hay eventos inimaginables que ponen de manifiesto la solidaridad como catástrofes, crímenes, indefensión y todo un cúmulo de angustias que necesitan de nuestra solidaridad.
Haz la diferencia…
Entre las actividades que más se suelen realizar están dirigidas a los menos favorecidos como: darles de comer, hacer una colecta de juguetes y ropa en buen estado y donárselos, realizar eventos recreativos y de entretenimiento en zonas públicas, buscar apoyo del sector salud para hacer campaña sanitaria, de revisión médica o de vacunación gratuita, ayudar a ancianos en sus compras diarias y más en esta época de pandemia. Hasta con los perritos de la calle podemos ser solidarios, dejando un balde con agua y comida.
Interésate por las personas que tienes en tu entorno, ahí comienza el cambio, y puede convertirse en una cadena de solidaridad que se puede celebrar día con día, no solo una vez al año; además nos ayudará a vivir en armonía y felicidad con los demás y con nosotros mismos.
Celebrar este día se puede convertir en algo natural… ¡Inténtalo y verás!
